domingo, 28 de agosto de 2011
Orgullo.
En determinadas ocasiones el orgullo se apodera de nosotros, y no deja salir esos sentimientos que morimos de ganas por decir. Sí, en ocasiones te diría que muero de ganas de verte, de abrazarte de nuevo y no soltarte, de que ciertos momentos no se repitan, sino que sean todavía mejores que los anteriores. Te diría también que me encanta tu voz, cuando sonries, cuando me coges la mano, cuando intentas ponerme celosa sabiendo que lo consigues y cuando me haces cosquillas aunque te diga que pares. Otra de las cosas que me gustaría decirte sería que me encanta besarte, me encantan esos pequeños mordiscos mientras te ríes pícaramente. Pero sobre todo, me encantaría decirte que para mi eres mucho más que eso, eres mucho más que simple atracción, mucho más que alguien con quien hablar, con quien compartir ciertos momentos aunque es difícil, mi gran orgullo me impide decirte todo esto y mucho más, por lo que me conformo con decirte con la mirada lo que con mi voz no puedo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario